Como afecta la actitud familiar frente a una persona con una adicción
LA ACTITUD FAMILIAR FRENTE A UNA ADICCIÓN
Sabemos que es duro ver a un ser querido en una situación como puede ser una adicción a las drogas. ¿Pero qué actitudes pueden llegar a fomentar que ese familiar siga sufriendo una adicción?
- Negar o justificar el consumo o su gravedad: no hablar o negar la drogadicción, no pedir ayuda o pensar que sólo con el tiempo bastará para que todo se resuelva
- Refuerzo negativo (controlar o perseguir): Esto no consigue que la persona deje el consumo, porque por norma general se castiga pero no se enseñan conductas positivas.
- Responsabilizarse de la persona con la adicción o sobreprotegerla: Algunos ejemplos podrían ser afrontar situaciones que le corresponderían a él o ella como por ejemplo dudas, hacerle las tareas de la casa que le corresponden, consentirle el consumo ver-lo como un enfermo o víctima, etc.
- Sobreimplicación emocional: Muy relacionada con el punto anterior, a largo plazo crea recaídas. Incluye conductas como, por ejemplo, hacer tareas por la persona enferma y que ella misma podría hacer, tener una conducta de excesivo autosacrificio como cuidador (se desvirtúa totalmente el rol de madre/padre/pareja/hermano, etc.), control excesivo sobre la conducta de la persona afectada (necesitar saber en todo momento, qué hace, dónde está, qué está pensando, qué siente…), dramatización de la situación (demasiada emoción expresada), y sentirse el verdadero responsable de que la persona cumpla con su tratamiento.
- Hacer que la adicción sea el tema central de la familia: Significa que toda la familia queda organizada entorno a la adicción, que se dejan de hacer planes individuales o que estos están muy condicionados por la adicción. Así mismo, la adicción se instala como tema constante de conversación. De esta forma, la adicción se va estructurando como tema central de la familia mientras otros temas importantes para otros de sus miembros que sería vital que fueran tratados para el buen desarrollo de la familia quedan olvidados.
- Relaciones de codependencia: El patrón de estas relaciones es disfuncional y se repite siempre de la misma forma y por lo tanto, es rígido. Un ejemplo muy esclarecedor de este tipo de relaciones es, por ejemplo, que uno de los dos en la relación intente salvar o proteger al otro (normalmente a la persona con la adicción), de algo al precio de no ocuparse de uno mismo. Esta protección fomenta la “incapacidad o invalidez” del otro e intensifica los problemas en las dos personas.
Cualquier estimulo o comportamiento inadecuado puede dar como fruto reacciones negativas en las personas que nos rodean que estén pasando por algún tipo de adicción. Aunque sea sin mala intención por nuestra parte. Por esto, los profesionales y psicólogos desempeñan un importante papel en la correcta evaluación, gestión y terapias a seguir, no sólo para alguien en tratamiento para la adicción, también para los familiares y amigos cercanos.
Si tú también quieres más información o necesitas de nuestra guía para ayudar a una persona con problemas de adicción, déjalo en nuestras manos ¡Vidanova siempre está contigo para ayudarte!