Saltear al contenido principal
adicción al móvil

La adicción al móvil

Aunque parezca exagerado, muchos investigadores están alertando de que hay muchas personas con teléfono móvil que están sufriendo problemas físicos y psicológicos como la ansiedad, palpitaciones y sudores cuando olvidan el móvil en casa, su tarjeta de prepago se queda a cero, se quedan sin cobertura o sin batería. Y es que la adicción al móvil, no es cosa de broma.

los jóvenes y la adicción al móvil

«los jóvenes y adolescentes son los más vulnerables a esta adicción»

Por desgracia, los jóvenes y adolescentes son los más vulnerables a esta adicción, por tanto, tenemos que extremar las precauciones con nuestros más pequeños, para no favorecer este tipo de adicción.

Está claro que puede ser muy beneficioso utilizar un móvil, nos proporciona información útil, tiene gps, música, comunicación por mensajería instantánea… pero muchos usuarios tienen que empezar a plantearse, si son “móvil-dependientes” al no estar ni un minuto sin su teléfono en sus manos.

¿Qué es esta adicción?

Para entender como es la adicción al teléfono móvil tenemos que entender la realidad de hoy en día.

A diario, se envían millones de mensajes en todas partes, en cualquier sitio oímos sonidos de timbres y melodías de forma constante y, casi en cualquier lugar, vemos muchas personas enganchadas a su fiel móvil para poder estar continuamente comunicado o consultar información de cualquier interés. De la misma forma que se produce en otro tipo de adicciones, el uso del móvil se convierte en adicción cuando pasa a ser una conducta repetitiva y que nos produce placer.
Por primera vez, se empieza hablar de que las nuevas tecnologías han pasado a formar parte de las denominadas adicciones psicológicas o adicciones sin drogas.

La publicidad y el móvil

Las empresas de telefonía hacen grandes campañas publicitarias para vender sus productos y nos bombardean con sus nuevos modelos.

Sus nuevos móviles son más rápidos, con mejor cámara de fotos, mejor diseño, más ligeros… siempre están poniendo a disposición del público un motivo para querer un nuevo dispositivo, creando así un círculo vicioso de consumismo y haciendo del Smartphone un objeto de deseo, sobre todo entre los más pequeños. A diferencia de otras adicciones, como el alcoholismo o la adicción al juego (ludopatía), etc. la edad en la que comienza es muy baja, desde los once o doce años

adicción al móvil en adolescentes

Adicción al móvil en adolescentes

Los más afectados por esta adicción son los adolescentes. La idea de “ocio o tiempo libre” va casi siempre unida al móvil y parece impensable que un adolescente no disponga de este objeto.

La adolescencia es un gran momento de cambio, es una época en la que los puntos de referencia cambian, es muy normal que se empiece a producir distanciamiento y falta de comunicación con los padres. Toda esta confusión en este momento de la vida de cada uno de nosotros, hace que los adolescentes sean el objetivo de las grandes empresas de publicidad para intentar convenceros de todos sus mensajes. Algunos son buenos, pero otros muchos solo responden a sus propios intereses económicos. Y ya sabemos que ni siquiera para los adultos es fácil diferenciarlos.

¿Cómo se crea esta adicción?

Para que una persona tenga adicción al móvil solo basta con que tenga problemas afectivos, con dificultades para hablar con los demás, o que esté en una época difícil de su vida.

En este último caso viene relacionado lo que acabamos de hablar, es decir, el periodo de la adolescencia en la que se es especialmente vulnerable a los múltiples reclamos que invaden la publicidad y que, muchas veces, no son ciertas. Como, por ejemplo, que es moda adelgazar, atarse a los videojuegos, comprar productos y productos sin fin y, cómo no, tener cuanto antes el último modelo de móvil.

Todo ello hará que un gran número de personas caigan víctimas de la dependencia móvil y, por tanto se convertirá en adicto. Y después, la adicción hará que la persona se desvíe de su entorno familiar, de sus amigos, llegando a un gran sufrimiento emocional.

Volver arriba